“Mi hija está infectada”
Gisela Torres, vecina del partido de Hurlingham, denunció en Primera Mano que en su barrio, como resultado de los residuos acumulados en una remoción de tierra efectuada por obras en el arroyo Morón, se transformó en un “criadero de mosquitos”.
“Las consecuencias las sufre todo el barrio”, apuntó Torres, quien contó que su pequeña hija tuvo que ser tratada en un sanatorio por una enfermedad contagiosa transmitida por mosquitos que infestan el lugar.
La vecina relató que a su hija le tuvieron que aplicar una inyección de corticoides en el hospital a raíz de las agudas erupciones que presentó y el médico -ante la preocupación de la madre por la epidemia de dengue- le aclaró que había sido otro tipo de mosquito el causante de la enfermedad.
Asimismo, Gisela Torres, reclamó que la zona es un gran basural y que no se fumiga pese a los pedidos incesantes al municipio. Además, aseguró que por “las noches la zona se convierte en el lugar elegido por una innumerable cantidad de murciélagos”.
sábado, 18 de abril de 2009
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