La Matanza

DENUNCIAN ESTAFAS EN
PLANES DE VIVIENDAS
Los vecinos del barrio “Unión de Trabajadores para la Vivienda” (UTEVI) de Isidro Casanova, actualmente llevan adelante una causa abierta por administración fraudulenta contra la sociedad civil encargada del complejo.

Según Miguel Barrios, uno de los vecinos damnificados entrevistado en Primera Mano, “la cantidad de familias estafadas asciende a casi doscientas”.
“Compramos, a través de un plan de viviendas, casas en un barrio, en ese momento en construcción, ubicado en Isidro Casanova. El plan luego resultó ser falso, y aún hoy seguimos sufriendo los perjuicios legales de esta situación”, señaló el denunciante.

El complejo, excluido además de los mapas oficiales presenta un deterioro grave de infraestructura: “El sistema cloacal, del barrio, está construido de manera muy deficiente ya que las aguas servidas de las casas, dan directamente a la calle, por lo que las condiciones sanitarias son muy desfavorables”.

“Hay innumerables denuncias realizadas, tanto por nosotros como por vecinos de otros barrios y que no son escuchadas”.
Sumado a eso, explica Barrios existe siempre “el riesgo de que te quieran tomar la vivienda, ya que al no tener las escrituras de los terrenos, nos encontramos indefensos también en materia legal a los intentos de usurpación”.

Por su parte, la Municipalidad de La Matanza, “no nos considera”, denuncia el vecino con un dejo de indignación y agrega que “el barrio no está dentro del plano catastral por lo que nos vemos privados de los servicios esenciales. Todo el complejo figura como terreno baldío”.

“Llamativamente cuando se iniciaron los reclamos en el municipio a través de la dra. Lorena Calvo, nuestra representante legal, los expedientes se extraviaban o cajoneaban por lo que tuvimos que recurrir a un juzgado federal”, desliza Barrios que agrega que “al no contar con el reconocimiento del municipio ni siquiera para los impuestos debemos lidiar con inescrupulosos que se acercan para ofrecernos conexiones que terminan en fraudes como un contratista que prometió la instalación de las redes necesarias de gas y que después de habernos cobrado salió con que no podía continuar con las obras por no tener permiso municipal. Y es en ese momento en que comprendemos que además de estafados estamos abandonados a nuestra suerte”.